Cuando los trastornos hormonales de la menopausia no permiten perder peso adecuadamente.

La unión de plantas diuréticas junto con plantas capaces de regular las hormonas en desequilibrio, logran facilitar la pérdida de peso, cuando se lleva una dieta adecuada. Contiene información física vibracional de picolinato de cromo y de L-carnitina, que potencian la acción del conjunto.

La elaboración de este extracto está hecha bajo la ya característica unión de varias formas extractivas, basada en un método original. Lleva tinturas, extractos fluidos y aceites esenciales en su composición, para hacer más efectiva la acción sinérgica de estas plantas. A su vez se ha incluido en el extracto información física vibracional de picolinato de cromo y de L-carnitina, para potenciar los efectos de pérdida de peso, por la acción de ambos en el metabolismo de las grasas.
Principalmente Zea mays, Solidago virgaurea, Hieracium pilosella y Betula alba, confieren al extracto acciones diuréticas de diversa índole, y por otro lado, Artemisia vulgare y Salvia officinalis actúan como reguladores hormonales.

VARA DE ORO (Solidago virgaurea)
Se emplean las partes aéreas floridas y desecadas de Solidago virgaurea L.
Contiene aproximadamente un 1,4% de flavonoides (hiperósido, rutósido, isoquercitrósido, astragalósido, kempferol-3-O-rutinósido), saponósidos triterpénicos (2,4%): virgaureasaponinas 1 y 2 (saponinas-éster bidesmosídicas del ácido poligalácico), heterósidos fenólicos bidesmosídicos: virgaureósido A (0,08-0,48%) y leiocarpósido (0,01-0,14%), diterpenos de tipo cis-clerodano, ácidos fenólicos: cafeico, clorogénico, aceite esencial (0,1-0,5%), taninos catéquicos, polisacáridos.
Acción diurética, antilitiásica y astiespasmódica, que produce relajación en el músculo liso genitourinario, por lo que alivia algo en los cólicos de riñón.
Según la Comisión E y ESCOP, están indicadas para incrementar la diuresis en inflamaciones del tracto urinario, así como en el tratamiento y la profilaxis de cálculos urinarios y como coadyuvante en caso de infecciones del tracto urinario. Como complemento diurético para tratar la obesidad. En uso externo se ha usado para cicatrizar heridas y úlceras.

SALVIA (Salvia officinalis)
Se emplea la hoja desecada.
Los principios activos más importantes de la hoja de salvia son: aceite esencial (hasta un 3%) constituido principalmente por alfa-tuyona (10-60%), beta-tuyona (4-36%), alcanfor (5-20%) y 1,8-cineol (2-15%). La composición es muy variable dependiendo de la procedencia de la droga, época de recolección, etc., derivados del ácido hidroxicinámico (ca. 3,5%), principalmente ácido rosmarínico (hasta 3,3%), que se han considerado de forma colectiva como “taninos” ya que pueden ser absorbidos por el polvo de piel, según el método de determinación de taninos de la Farmacopea Europea. Si bien, desde un punto de vista químico, no poseen la estructura de auténticos taninos, diterpenos fenólicos de sabor amargo, entre los cuales el más importante es el carnosol. Otros compuestos de interés son: flavonoides y triterpenos.
Es una gran planta para la mujer, calma los dolores de la regla (dismenorrea), combate eficazmente los trastornos hormonales de la menopausia y promueve la fertilidad. Se usa además para la frigidez, vaginismo y leucorreas. Es un gran tónico nervioso, y se usa en estados de astenia y desequilibrios neurovegetativos. Tiene acción antisudorífica, es antifebrífuga e hipoglucemiante. En afecciones digestivas por falta de jugos, úlceras, dispepsias. En las afecciones de la garganta, infecciones de la piel, picaduras. A las dosis indicadas esta planta no tiene efectos secundarios.

ABEDUL (Betula alba)
Se emplean las hojas secas, enteras o fragmentadas.
La hoja de abedul tiene como principales componentes los flavonoides (2,3-3,5%) y los derivados triterpénicos. Entre los flavonoides destacan el hiperósido (quercetina-3-O-galactósido) y la avicularina, así como otros heterósidos de la quercetina (como la quercetina-3-O-glucurónido, la quercetina-3-O-ramnósido o quercetrina), de la miricetina (miricetina-3-O-galactósido) y del kenferol. Contiene alcoholes triterpénicos y ésteres de tipo damarano con malonato en C-3 o acetato en C-12, triterpenos derivados del lupano (lupeol y derivados hidroxilados, betulina, betulinol, ácido botulínico).
Además, contiene arilbutanoides y diarilheptonoides glicosilados, sales potásicas (4%), ácido L-ascórbico (0,5%), compuestos fenólicos (3,4 dihidroxipropiofenona 3-glucósido, ácido cafeico y clorogénico), aceite esencial, taninos hidrolizables (galotaninos y elagitaninos), lignanos y saponinas.
Está demostrada una acción diurética, aumentado la excreción de agua y electrolitos. Por el efecto de arrastre previene la formación de arenillas y cálculos en las vías urinarias.
Acciones aprobadas por ESCOP y la Comisión E del Ministerio de Sanidad alemán: para incrementar la diuresis en afecciones bacterianas o inflamatorias de las vías urinarias bajas y en caso de presencia de arenilla y para la prevención de cálculos urinarios (“terapia de lavado de las vías urinarias”).
Además, la Comisión E aprueba su uso como coadyuvante en el tratamiento de las molestias reumáticas.
Popularmente se ha empleado también para la limpieza y desinfección de heridas.

PILOSELLA O VELLOSILLA (Hieracium pilosilla)
Se usan las sumidades aéreas o también la planta entera.
Contiene diferentes grupos de fenoles: flavonoides, como la isoetina y heterósidos de apigenina y luteolina, entre ellos la 7-O-glucosil-luteolina, ácidos fenoles: cafeico y clorogénico, cumarinas: particularmente umbeliferona (presente en la planta fresca en forma heterosídica: 7-O-glucosil-umbeliferona). Si bien se encuentra en toda la planta, las hojas son las que alcanzan mayor contenido.
Otros componentes: ésteres de alcoholes triterpénicos con ácidos grasos. La raíz acumula inulina.
Se ha usado tradicionalmente como diurético, considerando que estimula, de forma específica, la eliminación de cloruros, ácido úrico y urea. No hay estudios clínicos que avalen dicho efecto aunque el uso tradicional como diurético es claro aval de su interés como tal.
La umbeliferona se usa en la celulitis y como coadyuvante en las dietas de adelgazamiento.

ARTEMISA (Artemisia vulgaris)
Se usan las sumidades floridas.
Contiene: aceite esencial de composición muy variable: alcanfor, borneol, vulgarina e hidrocarbonos son constantes. Las tuyonas y las lactonas sesquiterpénicas se encuentran en muy pequeñas cantidades o están ausentes.
Es una gran planta como reguladora de las hormonas femeninas, por eso aprovechamos estas acciones para potenciar la gradual permanencia de los estrógenos en la mujer menopáusica.

MAÍZ (Zea mays)
Sus principales constituyentes son flavonoides, principalmente heterósidos de flavonas (maisina, heterósidos de luteolina, apigenina y crisoeriol). También se han identificado antocianidinas, heterósidos de flavonoles (rutina) y flavan-4-oles (luteoforol, apiforol). Contiene además sustancias lipídicas (2%) constituidas por ácidos grasos como linoleico y pantoténico, acompañados de esteroles (beta-sitosterol, estigmasterol); una pequeña cantidad de aceite esencial (0,2%); saponinas (2-3%); proantocianidinas (12%); mucílagos; vitamina K; y minerales, entre los que destaca un porcentaje considerable de sales de potasio (2,7%). Se ha detectado además la presencia de carotenoides y una pequeña cantidad de alcaloides (0,05%).
En el aceite esencial se han identificado como componentes mayoritarios: cis-alfa-terpineol (24,22%), 6,11-óxidoacor-4-eno (18,06%), citronelol (16,18%), trans-pinocamfona (5,86%), eugenol (4,37%), neo-iso-3-tuyanol (2,59%) e hidrato de cis-sabineno (2,28%).
Los estigmas se han empleado tradicionalmente como diuréticos, pues incrementan el volumen total de orina excretado y la eliminación urinaria de Na+, K+ y cloruros. Dependiendo de la dosis, se incrementa la filtración glomerular y se inhibe la reabsorción tubular de sodio y cloruros.
Se usa tradicionalmente para favorecer la eliminación urinaria de líquidos en caso de infecciones urinarias, para prevenir la formación de litiasis renales y como coadyuvante en el tratamiento del sobrepeso. Se utiliza en diferentes partes del mundo para el tratamiento de la retención de líquidos y para la cistitis, gota, cálculos renales y prostatitis. La OMS considera probada su eficacia clínica para el tratamiento de nefritis crónica.