Favorece la termogénesis, ayuda a transformar las reservas de grasas en energía calorífica, lo que contribuye a la pérdida de peso de manera más rápida, aumenta la actividad, ayudando así a combatir la celulitis, tiene propiedades antioxidantes. Es beneficioso en la diabetes.

CAFÉ VERDE (Coffea arabica)
Es café que no ha sido tostado; es decir, en estado puro con todas sus virtudes y principios activos, ya que en el tostado se pierden muchos principios de este fruto. Según estudios realizados, el café verde ayuda a la pérdida de peso, de una forma más o menos rápida. El sabor del café verde es algo más amargo que el tostado y el color y el aroma es diferente.
Calma el hambre y mantiene a la persona más tiempo sin necesidad de ingerir alimentos.
El café verde es saciante debido a su contenido en compuestos fenólicos (en especial, el ácido clorogénico). Ayuda a que las grasas se conviertan en energía, lo que ayuda a adelgazar. Produce un aumento de la actividad lipolítica, que es la que se encarga de regular que las grasas se depositen entre los tejidos corporales y responsables de los “michelines”.

Resumiendo sus acciones:

• Favorece la termogénesis, ayuda a transformar nuestras reservas grasas en energía calorífica, lo que contribuye a la pérdida de peso de manera más rápida.
• Aumenta nuestra actividad lipolítica y drenante (la actividad lipolítica es la capacidad de metabolizar las grasas que se depositan en el tejido adiposo), ayudando así a combatir la celulitis.
• Tiene propiedades antioxidantes. El café verde debe su poder antioxidante a los compuestos fenólicos, que atacan a los radicales libres, es decir, a las moléculas que dañan las células y aceleran el envejecimiento.
• Efecto saciante: el café verde es capaz de saciar el apetito debido a su alto contenido en compuestos fenólicos, de los cuales destaca el ácido clorogénico, capaz de aumentar la secreción intestinal del neuropéptido GLP1 (pequeñas proteínas que se van liberando en diferentes partes del organismo que envían señales cuando llegan a nuestro cerebro). Nuestro organismo libera GLP1 en el intestino cuando hemos comido suficiente, y en ese momento el GLP1 envía al cerebro una señal que activa los centros de saciedad, lo que provoca que nos sintamos llenos y nos cese el apetito.
• Reduce los niveles de presión arterial, reduce los niveles de colesterol, aumenta la energía y mejora el sueño, disminuye los niveles de estrés. No produce efectos adversos.

El café verde está recomendado para diabéticos con diabetes del tipo II. Las sustancias naturales extraídas de los granos de café sin tostar ayudan a controlar los altos niveles de azúcar en sangre y el peso del cuerpo en que se basa la diabetes tipo II.
Es un alimento con contenido en cafeína (aunque menos que el grano de café oscuro o molido, tiene menos del 20% que el café tostado). En adultos, la dosis recomendada varía entre 200 mg y 1.000 mg por día.
El café verde es más efectivo que el café tostado debido a que la torrefacción (proceso de tostado del café) destruye el cafesterol y el kahweol. Ambas tienen la particularidad de activar en el hígado la acción de una enzima muy importante: la glutation-S-transferasa o GST, que se encarga de activar el sistema de desintoxicación del organismo, contribuyendo a la eliminación de las sustancias contaminante como los pesticidas, los gases que despiden los automóviles, etc.

BANABA (Lagerstroemia speciosa)
Se emplean las hojas. Es un árbol típico de Filipinas y la India, en donde sus hojas han sido utilizadas como remedio popular para la salud, concretamente para regular el azúcar de la sangre, en afecciones de los riñones y del hígado y como ayuda para adelgazar.
Se han realizado investigaciones diversas y se ha encontrado que los extractos de hoja de banaba ayudan a disminuir la glucosa en sangre en personas con diabetes tipo II. Otros estudios han revelado que también podría contribuir en la pérdida de peso, factor de riesgo para el síndrome metabólico y las enfermedades cardiovasculares.
Resumiendo: ayuda a nivelar el azúcar en la sangre, promueve el control del apetito y el deseo de los alimentos, favorece la pérdida de peso y disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares y metabólicas.
Uno de los principales principios activos de este árbol es el ácido corosólico, un triterpeno pentacíclico, también conocido como ácido 2-alfa-hidroxi ursólico, que tiene actividad inhibidora de la alfa-glucosidasa. Esta enzima es la responsable de la hidrólisis de la sucrosa a glucosa, por tanto su inhibición reduce la hiperglucemia. Otro componente del extracto de banaba es la lagerstroemina, un derivado del ácido elágico, que activa la captación de glucosa por los adipocitos. Se fija en los receptores insulínicos e induce una actividad tirosinakinasa, específica de este receptor. Esto da lugar a una cascada de reacciones que se traducen en una lipolisis y un transporte activo de la glucosa. A la lagerstroemina se la considera un mimético de la insulina. Otro compuesto más, la dilactona del ácido valoneaico, actúa como precursor de la lagerstroemina. Inhibe el alfa-amilasa. Esto explica la eficacia de la lagerstroemina reduciendo la biodisponibilidad de los carbohidratos. Esta lactona es también inhibidora de la xantinooxidasa, que inhibe la producción de ácido úrico.

FUCOXANTINA
Es un tipo de carotenoide que se encuentra de forma natural en algas comestibles de color marrón. La fucoxantina reduce la ansiedad por comer, aumenta el gasto de energía en reposo, además de aumentar la oxidación lipídica y la lipólisis.
La fucoxantina es un producto natural que ejerce un papel de mucha importancia sobre la tasa metabólica. En estudios recientes se ha comprobado que la fucoxantina mejora la actividad natural del tiroides, lo que produce un aumento de los depósitos de energía y una disminución de las grasas en las personas obesas. Parece que actúa aumentando el ritmo al que se quema la grasa abdominal. Este efecto parece ser debido a que estimula la formación de DHA, un tipo de ácido graso omega-3 que aumenta la sensibilidad a la insulina, mejora los niveles de triglicéridos y reduce los niveles de colesterol LDL (colesterol “malo”).
Aunque no se entiende completamente cómo funciona la fucoxantina, parece que se dirige a una proteína llamada UCP1 que aumenta la velocidad con la que se quema la grasa abdominal. La fucoxantina ejerce un efecto termogénico clínicamente probado, de gran alcance puesto que cataliza la degradación de la grasa abdominal de forma segura y sin estimular el sistema nervioso central. Reduce la grasa de reserva de los adipositos abdominales y evita que la futura grasa se acumule, gracias a un mecanismo vinculado con la nutrigenómica, pues es capaz de aumentar la expresión de un gen en el tejido graso y promover la termogénesis focalizada.

PICOLINATO DE CROMO
Componente orgánico de cromo trivalente, cofactor de la insulina que mejora su sensibilidad en tejidos periféricos. Parece que su ingestión mejora el perfil glucémico y lipídico. Otros atribuyen un efecto reductor de peso incrementando la masa magra y la tasa metabólica basal. Es un derivado del ácido graso octanoico, rico en azufre y lisina.