Prepara el terreno fisiológico ideal para la activación de la microflora sana y aporta principios fitoterapéuticos que contribuyen a combatir la flora patógena. Favorece la protección y restauración de las mucosas inflamadas suministrando los nutrientes que favorecen su activación y contribuyen a impedir la proliferación de bacterias, levaduras y virus patógenos. Genera señales reguladoras que promueven la restauración de las propiedades fisiológicas de la mucosa, que desde el tracto intestinal regulan la inmunidad, el metabolismo y la vitalidad del sistema nervioso y cardiovascular. Por su efecto protector sobre la delicada mucosa intestinal, previene la discontinuidad de la mucosa y aporta un efecto antinflamatorio, antioxidante y regulador de la inmunidad. Además, promueve el efecto simbiótico específico entre probióticos y prebióticos.

La composición ponderal de la nutrición no es suficiente para garantizar el anabolismo de los nutrientes esenciales y la eliminación adecuada de los desechos tóxicos. En esta dirección, el Bio-Regulador HoloRam^® Foodbiotic contribuye a la micronutrición y señalización sistémicas que inducen el sano equilibrio de la flora intestinal. Promueve la autoregulación y el restablecimiento de la simbiosis entre las bacterias benéficas, sus sustratos orgánicos, el hábitat gastrointestinal y los sistemas orgánicos.   Suministra pequeñas dosis activadas de sustancias naturales inductoras de la fisiología intestinal normal, restaurando la memoria de los programas de absorción y eliminación adecuadas a una correcta nutrición. Estos efectos repercuten en la armonización fisiológica de múltiples sistemas orgánicos.

Acción sistémica antiinflamatoria, antioxidante, adaptógena e inmunomoduladora, propia de los fitoterápicos empleados en su elaboración.

Acción directa que favorece la nutrición y actividad de la microbiota benéfica, especialmente bifidobacterias y bacterias acido lácticas.

El HoloRam^® Foobiotic facilita la accesibilidad de las bacterias a sustratos enzimáticos, minerales y vitamínicos originados en las plantas, buscando la activación selectiva de la proliferación colónica de cepas consideradas beneficiosas para la salud (bifidobacterias y lactobacilos).

La presencia de fructanos como fructo-oligosacáridos, guar y fibra de acacia favorece la fermentación y la producción de ácidos grasos de cadena corta que tienen un efecto regulador sobre el metabolismo sistémico. En síntesis, entre otros beneficios, el consumo de prebióticos mejora el tránsito intestinal, el mantenimiento de la mucosa intestinal, el balance de agua y electrolitos, la energía y absorción de nutrientes y aumenta la resistencia frente a patógenos.

De estos mecanismos podemos colegir la multiplicidad de indicaciones de la simbiosis prebióticos/probióticos. Entre las patologías y condiciones que pueden ser apoyadas con los probióticos y prebióticos encontramos:

• Diarreas esporádicas y crónicas.
• Diarreas por rotavirus.
• Diarreas asociadas a antibióticos.
• Infecciones por Helicobacter pylori.
• Encefalopatía hepática.
• Enfermedad inflamatoria intestinal.
• Intolerancia a la lactosa.
• Patología infecciosa general.
• Infecciones genitourinarias.
• Patologías del sistema inmunológico.
• Patologías neuropsiquiátricas y trastornos psicológicos.
• Infecciones respiratorias y otorrinolaringológicas.
• Patologías bucodentales, enfermedad periodontal y caries.
• Enfermedades metabólicas como obesidad, dislipemias, hipertensión, síndrome metabólico.
• Ciertas patologías pediátricas (otitis media, dermatosis atópica, enterocolitis necrotizante, cólico del lactante, prevención de obesidad).