Es necesario resaltar la notable eficacia de la vitamina C natural, que es muy biodisponible comparada con la sintética. Se trata aquí de vitamina C contenida en la acerola de forma natural sin ningún aporte extra de vitamina C sintética. Son múltiples las acciones de la vitamina C (ver en el apartado de explicación todas ellas). Hay que destacar su relación con el colágeno y la formación de tejidos, su efecto antioxidante, la regulación del sistema inmunológico y la protección vascular y cardiaca, entre otras muy variadas acciones.

Fue descubierta por Zilva en 1917. Fue James Lind en 1753 quien descubrió los beneficios de los cítricos para curar el escorbuto, típico en los marineros de esa época.

La vitamina C es una vitamina hidrosoluble que el organismo humano no puede sintetizar y tiene que tomarla en los alimentos, como son las verduras verdes, frutos cítricos y patatas, entre otras muchas. Una dosis de 60 mg al día es suficiente para estar saludable. En personas de mucho peso mejor 90 mg/día.

Se absorbe en el estómago y parte superior del intestino. Se elimina por heces y orina, y no es acumulativa, por tanto su toxicidad es muy baja. El tabaco la destruye por lo que los fumadores deben aportarla diariamente.

El estrés y la polución producen un hiperconsumo de vitamina C, por ello hay que aportarla más, lo mismo que debe hacerse si se toman corticoides por su efecto supresor de la inmunidad.

Propiedades de la vitamina C:

• Relacionada con el mantenimiento de los huesos, cartílagos, dientes y vasos sanguíneos.
• La síntesis de colágeno depende de la vitamina C.
• Protege a la vitamina A y E de la oxidación, así como a algunas vitaminas del grupo B (tiamina, riboflavina, ácido fólico y ácido pantoténico).
• Interviene en la cicatrización de heridas y reparación y mantenimiento de tejidos en general.
• Interviene en la síntesis de hormonas y de neurotransmisores.
• Es un buen antioxidante, protector de radicales libres nocivos.
• Mejora la visión y es preventiva de cataratas.
• Elimina del organismo los nitritos y nitratos, productores de tumores y presentes en muchos embutidos.
• Estimula y regula el sistema inmunológico. Estimula el interferón.
• Disminuye las complicaciones de la diabetes tipo II.
• Baja la tensión arterial y previene enfermedades vasculares.
• Previene la lesión oxidativa del ADN y su posible cambio genético que da lugar a tumores diversos: Diversos estudios demuestran que es un preventivo de tumores como el de esófago, estómago, recto, páncreas, cérvix y mama. Se cree que se debe a su protección del ADN y al bloqueo que ejerce sobre la nitrosaminas.
• Estimula el sistema inmune, aporta resistencia a la infección.
• Es antialérgica.
• Ayuda en las enfermedades de la piel como eczemas y psoriasis.
• Aumenta los estrógenos en la menopausia.
• Alivia el estreñimiento.
• Tiene relación directa con la absorción de hierro.

Usos:

• Muy usada para combatir catarros y gripe, así como afecciones respiratorias y otras infecciones.
• Elimina los metabolitos tóxicos de la catabolización de las grasas. Estos metabolitos se relacionan con tumores diversos, enfermedades cardiovasculares (ya que producen inflamaciones y depósitos en las paredes de los vasos), enfermedades crónicas, Alzheimer y patologías autoinmunes.
• Es un estimulador del metabolismo hepático por lo que se considera que es hepatoprotectora.
• Es desintoxicante de metales pesados, especialmente si se combina con zinc y magnesio.
• Relacionada con la disminución de viscosidad sanguínea y las concentraciones de fibrinógeno que puede dar lugar a trombos. Ayuda a mejorar la hipertensión.
• Tiene un efecto psicorregulador en la ansiedad y el insomnio.
• Ayuda a los pacientes de Parkinson y en general en trastornos neurológicos y neuropatías periféricas.
• Tiene que ver con la salud de las arterias y disminuye el riesgo de trombosis, infartos y hemorragias, porque tiene que ver con la disponibilidad del óxido nítrico, que es un vasodilatador.
• Protege el endotelio vascular del exceso de homocisteína y el daño oxidativo, reduciendo el PCR que indica el riesgo de padecer enfermedad cardiovascular.
• Se ha visto que reduce el riesgo de gota y baja los niveles de ácido úrico.
• Beneficiosa para pacientes con síndrome metabólico. Se relaciona con altos niveles de colesterol HDL (“bueno”) y reducción de LDL (“malo”) y triglicéridos. Previene daños vasculares en los riñones, lo que supone una ayuda en los diabéticos.

AGONISTAS Y ANTAGONISTAS DE LA VITAMINA C

Son agonistas las vitaminas y los minerales en general: bioflavonoides, calcio, magnesio, glutatión o lecitina de soja. Son antagonistas: el alcohol, los antibióticos, el tabaco, los antihistamínicos, las aspirinas, cortisona, sulfamidas, estrógenos y anticonceptivos orales.

FUENTES DE VITAMINA C

Las mejores fuentes son la acerola, el melón y la sandía, los cítricos, el kiwi, el mango, la papaya, la piña, las fresas, las frambuesas, las moras y arándanos, el brócoli, las coles de bruselas, las coliflor, los pimientos rojos y verdes, las espinacas, el repollo, los nabos y otras verduras de hoja, las patatas y los tomates.

CAUSAS DE DÉFICIT DE VITAMINA C

Puede producir déficit la mala nutrición, cocinar a altas temperaturas, comer mucho producto refinado, ahumados, café, té negro, estrés, ser fumador, metales pesados, nitratos, sulfitos, medicamentos como la aspirina, antibióticos o antiinflamatorios, anticonceptivos orales, cortisona, antihistamínicos. El alcohol y las drogas en general así como las enfermedades crónicas.

Su deficiencia da ciertos síntomas:

• Inflamación y sangrado de encías.
• Piel áspera y seca.
• Hematomas espontáneos.
• Deficiente cicatrización de heridas.
• Sangrado nasal.
• Dolor e inflamación articular.
• Esmalte dental débil.
• En su máxima expresión da lugar al escorbuto (encías inflamadas y sangrantes, hemorragias, anemia, debilidad).

Alto contenido de vitamina C:

La vitamina C contribuye a la formación normal de colágeno para el funcionamiento normal de los vasos sanguíneos, de los huesos, de los cartílagos, de las encías, de la piel y de los dientes; contribuye al metabolismo energético normal, al funcionamiento normal del sistema nervioso y del sistema inmunitario, a la función psicológica normal y a la protección de las células frente al daño oxidativo; ayuda a disminuir el cansancio y la fatiga y a regenerar la forma reducida de la vitamina E. La vitamina C mejora la absorción de hierro.